¿A quiénes se debería asegurar un salario mínimo?

Sudáfrica - Introducción de un salario mínimo sectorial para los trabajadores domésticos

En Sudáfrica, la introducción del salario mínimo para las trabajadoras y los trabajadores domésticos formó parte del gran número de reformas que se emprendieron en los años posteriores a la transición desde el sistema de segregación racial o apartheid hacia la democracia, en 1994. Hay en este país entre 780.000 y más de un millón de personas ocupadas en el servicio doméstico, en su mayoría mujeres africanas y de color.

El proceso de establecimiento de un salario mínimo se inició formalmente en 1999, cinco años después de las primeras elecciones democráticas que marcaron el fin de la era del apartheid. El salario mínimo entró en vigor a finales de 2002, poco más de ocho años después de la primera elección democrática. El salario mínimo para las trabajadoras y los trabajadores domésticos fue el resultado de un proceso que incluyó una campaña de sensibilización impulsada por los sindicatos, una investigación sobre los salarios y las condiciones laborales del personal doméstico, y una serie de talleres y audiencias públicas.

La introducción de un salario mínimo y de otras protecciones para los trabajadores domésticos puede ser considerada como uno de los éxitos de Sudáfrica en el período posterior a 1994. En particular, fue un paso importante en el reconocimiento del personal doméstico como trabajadores con derechos, que pasaron de ser considerados como simples "sirvientes" para convertirse en "trabajadores" de pleno derecho. La introducción del salario mínimo también se ha descrito como parte de un proceso antiesclavista y de reafirmación de la dignidad del trabajo doméstico. Hasta entonces, el trabajo doméstico había sido quizás la peor manifestación de la explotación de las mujeres de raza negra.

Sin embargo, aún quedan muchos "asuntos pendientes", ya que al personal doméstico se le sigue aplicando el nivel de salarios mínimos más bajo de todos los trabajadores de Sudáfrica; además, el cumplimiento de las normativas sigue planteando dificultades.

Fuente: Debbie Budlender: "The introduction of a minimum wage for domestic workers in South Africa", documento de trabajo de la OIT, Ginebra, 2016.