El Trabajo Forzoso en la Extracción de la Madera en la Amazonía Peruana

Este estudio presenta los resultados de una investigación, encargada por un antropólogo y un científico social, sobre la existencia del trabajo forzoso en Perú.

El estudio se basa en entrevistas dirigidas a funcionarios del Estado, trabajadores y dirigentes indígenas de la Amazonía peruana, empresarios madereros, miembros de la comisión y de la policía anti-tala,religiosos, profesionales e intelectuales que trabajan en diversas ONG, y sobre información cualitativa y cuantitativa de carácter secundario.

El estudio revela la existencia de trabajo forzoso, o no libre, principalmente en las laborales asociadas a la extracción ilegal de la madera en diversas regiones de la cuenca amazónica peruana. La investigación señala que en la Amazonía un número importante de madereros fundamentalmente ilegales o informales, continúa utilizando el sistema de habilitación –enganche, basado en el anticipo de dinero o bienes a los trabajadores con el objetivo de incorporarlos a las labores de extracción de la madera. Lamentablemente, el mencionado patrón de reclutamiento de trabajadores conduce a un sistema de peonaje o servidumbre por deudas.

El trabajo forzoso es a menudo una manifestación de un patrón más amplio de discriminación hacia los pueblos indígenas. El estudio muestra que la intensidad de los abusos y privaciones varían según su grado de exposición a la sociedad de mercado y según el aislamiento geográfico en el que vivan. La explotación y privación de libertad son más extremas en el caso de las comunidades más remotas y aisladas. El trabajo forzoso y la servidumbre por deudas entre los trabajadores indígenas son también una consecuencia de una insuficiente inversión en su educación. Género y edad son otros factores que van a determinar el tipo de trabajo forzoso en el que la gente se puede ver atrapada. Aunque es el hombre quien contrae la deuda, generalmente la familia entera tiene que contribuir con su trabajo para saldar la misma. El trabajo de las mujeres no suelo ser remunerado y si lo es, es peor remunerado que el de los hombres puesto que están consideradas como meras ayudantes de los mismos.