Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".

Día Internacional de los Pueblos Indígenas

En Bangladesh se tienden puentes para los pueblos indígenas

En ocasión del Día Internacional de los pueblos indígenas del mundo, hablamos con Sulekha Mrong, una mujer de etnia garo que vive en las colinas del noreste de Bangladesh. Ella explica cómo una iniciativa de la OIT ayuda a los pueblos indígenas a comprender mejor sus derechos y a establecer relaciones positivas con las autoridades del gobierno.

Reportaje | Bangladesh | 9 de agosto de 2016
Ms Sulekha Mrong
La luz ilumina suavemente el rostro de Sulekha Mrong mientras habla de su comunidad, el pueblo indígena garo. Sentada cómodamente habla con el ritmo lento y pausado de alguien que ha tenido que esperar mucho, pero que también está completamente seguro que lo que están esperando merece la pena.

“Trabajamos a favor de las mujeres y hombres indígenas, para empoderarlos, promover sus derechos, para unirlos”, explicó la maestra jubilada de 52 años.

Los garo son una de las numerosos comunidades indígenas de Bangladesh. Ellos viven en la parte nororiental del país, pero los asentamientos ilegales de personas que no pertenecen al pueblo garo invaden los bosques y se multiplican las disputas por reclamación de tierras. Los garo han sido marginados en su propia tierra, tienen que enfrentar muchos desafíos para disfrutar de sus derechos humanos y a la tierra.

La iniciativa de la OIT, Fortalecer las capacidades sobre cuestiones relacionadas con los pueblos indígenas y tribales en Bangladesh: Derechos y buenas prácticas, financiada por el Gobierno de Dinamarca, trabaja con las comunidades indígenas y las autoridades del gobierno de Bangladesh a fin de crear una mayor concienciación acerca de los derechos y responsabilidades de los pueblos indígenas.

La asociación Achiki Michik (AMS), constituida por mujeres de etnia garo, recibió apoyo del proyecto para organizar cursos de formación y talleres sobre los derechos de los pueblos indígenas y los convenios que los protegen. En calidad de líder local y como parte de la AMS, la participación de Sulekha Mrong, garantizó que estos conocimientos fuesen transmitidos a otros miembros de la comunidad.

En los talleres de la OIT, también se promovió la elección de dirigentes y representantes del Departamento forestal por parte de los garo, a fin de tender puentes entre el pueblo indígena y las autoridades públicas.

“Actualmente comprendemos que existen servicios a nivel local para atender las necesidades de los pueblos indígenas. Consultamos diversos órganos administrativos para obtener información sobre estas cuestiones. Al principio, no querían escucharnos, pero insistimos, volvimos a tocar las puertas de las oficinas, pidiendo información, solicitando servicios según sus criterios y, poco a poco, logramos que nos escucharan”.

“Comenzaron a entender lo que estamos haciendo y nos permiten participar en las discusiones sobre los problemas que nos afectan”, agregó Sulekha Mrong,

Los garo son unos de las pocas sociedades matriarcales que quedan en el mundo. La herencia se transmite a las mujeres y los hijos adoptan el apellido de la madre. Esto otorga a las mujeres garo mayores responsabilidades, quienes, explica Sulekha Mrong, no siempre disponen de la preparación necesaria para enfrentarlas.

“Como mujer indígena garo, heredé la tierra. Pero en realidad, no sabíamos mucho sobre la gestión de la tierra, sólo conocíamos las tradiciones. Gracias al apoyo de la OIT, aprendimos a administrar, a obtener un certificado de propiedad de nuestra tierra y a ejercer nuestros derechos tradicionales en las estructuras no tradicionales. Sabemos cómo actualizar los documentos de propiedad de la tierra, cómo comunicar con los funcionarios del catastro y conocemos nuestros derechos sobre las tierras”.

Fomentar una mejor comprensión

El Director de la Oficina de la OIT en Bangladesh Srinivas Reddy está de acuerdo, a su juicio la situación está mejorando gradualmente.

“Los cambios que han tenido lugar en los últimos años son un indicio de un futuro mejor para los pueblos indígenas en Bangladesh. La OIT seguirá ofreciendo apoyo en este ámbito y, simultáneamente, estimulará al gobierno a aplicar cabalmente las políticas y los acuerdos que han sido firmados sobre la materia”, agregó.

Por otra parte, Sulekha Mrong está convencida de que las actividades del proyecto han ayudado a mejorar las relaciones entre los pueblos indígenas y las autoridades.

“Poco a poco la distancia entre nosotros se está reduciendo. El solo hecho de conocernos mutuamente, es útil para ambas partes. Hoy día, cuando necesitamos discutir alguna cuestión, las autoridades comienzan a darnos un espacio de participación. Históricamente, la relación no ha sido paritaria. La formación contribuye a situarnos en el mismo nivel, cuando antes no estábamos ni siquiera en el mismo plano”.